viernes, 1 de abril de 2011
Tengo cosas que contarte... y no hay un día mejor.
Las pulsaciones se disparan cuando lo veo conectado, con una foto de su cara, parece mentira pero yo un día besé esos labios, mientras decía cosas de las que aún ando enamorada. Tengo ganas de preguntarle ¿qué tal, cómo va todo?, pero me dolería demasiado ser su colega sólo, además sería absurdo. Así que me pongo una canción, que silencie el llanto de lo que en su despedida nació. Como un íntimo desconocido no me dice nada, tal vez pensando lo mismo o chateando con un ligue anda... Y en unos segundos pasa media hora. La música seca mis ojos pero mis manos lloran. Estoy a punto de escribirle pero mi impulso se colapsa, parecen darme collejas todas las paredes de mi casa. Tengo miedo de que por su parte todo sea frío y compruebe que ya nunca más estará a mi lado. Pienso en desconectarme pero me juro una canción más...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Mi vida es mía y de nadie más
¿Quién ha dicho
que no puedo?, si quiero ahora mismo pongo mi canción favorita, tan alta como se pueda y empiezo a cantarla a gritos si eso me hace feliz, ahora mismo puedo desenamorarme, llamar a cualquier chico que conozca y finjir estar enamorada de él, ¿Quién me lo impide?, puedo comerme ahora una enorme tarrina de helado de chocolate y no sentirme culpable, fumarme uno tras otro los cigarros que quedan en mi cajetilla, puedo quedarme despierta hasta las cinco de la mañana si me apetece, ¿Quién va a ser capaz de juzgarme?, puedo ponerme un vestido más corto de lo permitido y parecer una princesa, y bailar claqué en una calle alborotada de gente, sin música, sin saber bailar, sin importarme quién me mire, puedo ir a un parque sólo para sentir que vuelo en los columpios, para volver a mi infacia tan solo unos segundos, o ir al cine sólo para estar en la oscuridad y no sentirme sola, quedar con diez chicos a la misma hora y dejarlos a todos plantados por dar un paseo con mi perro, ¿Quién ha dicho que eso no es normal?, sinceramente prefiero hacer cosas fuera de lo normal, porque la palabra normal suena aburrida, ¿Quién ha dicho que no soy libre?, ¿Quién?, ¿Quién ha dicho que no puedo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario