jueves, 17 de noviembre de 2011
Creo que deberías saberlo o llevar una idea...
Pero por si acaso, te lo aclararé cielo. En esta vida, básicamente todos o gran parte de las personas de tu alrededor, van a terminar haciéndote daño. Habrá gente que lo hará sin querer, y otra tanta que lo hora por joder, pero tranquila. Esto, lo más seguro es que te produzca ciertos trastornos emocionales, y te pondrás canciones deprimentes, comerás helado a las cuatro de la mañana, claro que después de haber estado una hora llorando recordando como en la película de atena3 el anciano murió sin despedirse del nieto, o que por una puta suertuda casualidad, la mujer coincidió con el amor de su vida en la última parada de tren. Y te harás replantearte ciertas cuestiones de la vida. Veras, vas a seguir sintiéndote mal cada vez que esa persona pase de ti. Van a decirte cosas que duelan toda la puta vida. Vas a perder a gente importante. Vas a terminar por lo menos cinco de cada 10 noches de sábado enredada en las sabanas viendo un maratón de “pelisdepre” porque noséquien no se acordó de llamar… o algo de eso, ya sabes a lo que me refiero ¿no? Son de esas cosas inevitables en la vida. Asique tranquila, ya sabes que todo el mundo va a lastimarte. Solo debes darte cuenta por quienes vale la pena sufrir.
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Mi vida es mía y de nadie más
¿Quién ha dicho
que no puedo?, si quiero ahora mismo pongo mi canción favorita, tan alta como se pueda y empiezo a cantarla a gritos si eso me hace feliz, ahora mismo puedo desenamorarme, llamar a cualquier chico que conozca y finjir estar enamorada de él, ¿Quién me lo impide?, puedo comerme ahora una enorme tarrina de helado de chocolate y no sentirme culpable, fumarme uno tras otro los cigarros que quedan en mi cajetilla, puedo quedarme despierta hasta las cinco de la mañana si me apetece, ¿Quién va a ser capaz de juzgarme?, puedo ponerme un vestido más corto de lo permitido y parecer una princesa, y bailar claqué en una calle alborotada de gente, sin música, sin saber bailar, sin importarme quién me mire, puedo ir a un parque sólo para sentir que vuelo en los columpios, para volver a mi infacia tan solo unos segundos, o ir al cine sólo para estar en la oscuridad y no sentirme sola, quedar con diez chicos a la misma hora y dejarlos a todos plantados por dar un paseo con mi perro, ¿Quién ha dicho que eso no es normal?, sinceramente prefiero hacer cosas fuera de lo normal, porque la palabra normal suena aburrida, ¿Quién ha dicho que no soy libre?, ¿Quién?, ¿Quién ha dicho que no puedo?
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